de Santiago Tena

hágase, niña mía, hágase vivo el amor en tu espacio, hágase en ti la luz y en mí la vida, hágase, amor cercano, cercano nuestro amor, el beso en voz, la voz beso y presencia y estoy dentro, hágase de tu amor el mundo niño, el mundo que te busco, el que soy mundo y carne y poeta y ardor solo por ti, hágase el desinhibo, hágase el nos buscamos, hágase el en ti estoy, hágase del amor el vino de la cena, el esperar, el ven, el has venido, el correo directo, el te busco y me arriesgo y voy por ti y si duele no importa que me duela: te he vivido, hágase del amor vino y dolor y cena y despedida y voy y luego vuelvo, del amor que queremos hágase libertad, y con la libertad la luz del mundo, y que inaugure el mundo en ti y en mí un renacer de esperas sin espera, un renacer de yas sin todavías, un renacer de escarcha, de sol vivo, de dónde, de por qué no me escribes, un renacer de voy, un renacer de quiero, un renacer de no tan solo en público, un renacer de quiero y lo deseo y te lo digo claro y te lo digo cierto: lo quiero y lo deseo y voy por ti y a ti, y estando en ti y llegando, a donde en verdad llego y donde voy y quiero y sé que está esperando y que me llama en ti, es a mí mismo, niño hambriento y gozoso y cálido y feroz dentro de ti, niño que necesita de mí mismo: sé la puerta abierta y encantada y serena y ansiosa y atractiva e imán, y vientre vivo y tú, quererme vivo y tú, volarme vivo y tú, volcarme vivo y tú, amar, amar:

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21 abril 2009

ESTE AMOR NO ES CASUALIDAD

Este amor que siento no es casualidad, no es agua estancada, es grande y bello, es vida, es luz, y comenzó desde nuestro primer encuentro, y durará toda la eternidad. 
No tienes porque huir de el.                                                                                                                                                                                                                                           
Este poema de Borges me encanta.  Por qué el  hombre  huye al verdadero amor?   pregúntome yo.
                                                                                                                                                                                                                           
El Amenazado
Es el amor.  Tendré que huir.
Crecen los muros de su cárcel,
como en un sueño atroz.
La hermosura máscara ha cambiado,
pero como siempre es la única.
De que me servirán mis talismanes,
el ejercicio de la letras, la vaga erudición,
el aprendizaje de las palabras que uso,
el áspero Norte para cantar
sus mares y sus espadas,
la serena amistad, las galerías de la biblioteca
las cosas comunes, los hábitos el joven amor
de mi madre, la sombra militar de mis muertos
la noche intemporal el sabor del sueño?
Estar contigo o no estar contigo
es la medida de mi tiempo.
Ya el cántaro se quiebra sobre la fuente,
ya el hombre se levanta a la voz del ave
ya se han oscurecido los que miran por las ventanas,
pero la sombra no ha traido la paz.
Es, ya lo sé, el amor: la ansiedad y el alivio
de oír tu voz, la espera y la memoria, el horror
de vivir en lo sucesivo.
Es el amor con sus mitologías, con sus pequeñas
magias inútiles.
Hay una esquina por la que no me atrevo a pasar.
Ya los ejércitos  me cercan, las hordas
(Esta habitación es irreal, ella no la ha visto)
El nombre de una mujer me delata.
Me duele una mujer en todo el cuerpo.
Borges

2 comentarios:

Anónimo dijo...

borges siempre, qué tío

LC dijo...

Hola amor y libertad!
Ya ves,
gracias por tu luz
Regresa!!!!