de Santiago Tena

hágase, niña mía, hágase vivo el amor en tu espacio, hágase en ti la luz y en mí la vida, hágase, amor cercano, cercano nuestro amor, el beso en voz, la voz beso y presencia y estoy dentro, hágase de tu amor el mundo niño, el mundo que te busco, el que soy mundo y carne y poeta y ardor solo por ti, hágase el desinhibo, hágase el nos buscamos, hágase el en ti estoy, hágase del amor el vino de la cena, el esperar, el ven, el has venido, el correo directo, el te busco y me arriesgo y voy por ti y si duele no importa que me duela: te he vivido, hágase del amor vino y dolor y cena y despedida y voy y luego vuelvo, del amor que queremos hágase libertad, y con la libertad la luz del mundo, y que inaugure el mundo en ti y en mí un renacer de esperas sin espera, un renacer de yas sin todavías, un renacer de escarcha, de sol vivo, de dónde, de por qué no me escribes, un renacer de voy, un renacer de quiero, un renacer de no tan solo en público, un renacer de quiero y lo deseo y te lo digo claro y te lo digo cierto: lo quiero y lo deseo y voy por ti y a ti, y estando en ti y llegando, a donde en verdad llego y donde voy y quiero y sé que está esperando y que me llama en ti, es a mí mismo, niño hambriento y gozoso y cálido y feroz dentro de ti, niño que necesita de mí mismo: sé la puerta abierta y encantada y serena y ansiosa y atractiva e imán, y vientre vivo y tú, quererme vivo y tú, volarme vivo y tú, volcarme vivo y tú, amar, amar:

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25 febrero 2009

EL VENDEDOR

En la plaza vacía nada vendía el vendedor
y aunque nadie compraba
no se apagaba nunca su voz, 
no se apagaba nunca su voz
Voy a poner un mercado
entre tantos mercaderes
y para vender esperanzas
y comprar amaneceres
para vender un día 
la melodía que hace al andar
el agua de ese rio es como un grito
de libertad, es como un grito de libertad
Quién quiere vender conmigo la paz
de un niño durmiendo
la tarde sobre mi madre
y e tiempo en que estoy queriendo
Tu eres el que ha pasado el que ha llegado 
y el que vendrá
Vende el árbol que queda
en la arboleda de la verdad
Voy a ofrecer por el aire
las alas que no han volado
y los labios que recuerdan
la boca que Lo han besado
Alza cada mañana
esa campana de tu canción
pregonero que llevas
mil cosas nuevas en tu pregón
Vendo en una cesta el agua 
y la nieve en una hoguera
y la sombra de tu pelo
cuando inclinas la cabeza
Mocedades
Imagen vista en Google
QUE TU VOZ NUNCA SE APAGUE!

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