Autor: Alejandro Filio
Llegaba la tarde color de ceniza.
Volando la seis como pájaro intacto.
detrás de tu paso detrás de tu risa
No hay noche ni encanto que te sobreviva
Mujer que caminas, mujer que caminas
Será porque escribo tu nombre en el muro
de un patio que apenas se ve iluminado.
Será que he dejado tu voz en lo oscuro
desde mi garganta hasta el pecho del tiempo
te busco, te invento. Te busco te invento.
No hay paso que alcance a los enamorados
Hay tantos que corren y viven buscando
Que pasan deprisa, que siguen de largo
sin ver a su lado.
Para dar con ella me di por completo
y de tanto dar se nos dio la mañana
Después entre sábanas por su cabello
Más pena que gloria para lo que digo
buscaba mi abrigo, tan solo mi abrigo.
A veces la miro feliz en mi mundo
tan libre, tan clara como la mañana.
Será que me engaña mi vista de absurdo
Porque cuando vuelvo, no encuentro su huella
detrás de mi estrella, detrás de mi estrella.
No hay paso que alcance a los enamorados
Hay tantos que corren y viven buscando
que pasan de prisa, que siguen de largo.
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